Ya no huele a rosas

El desierto y la soledad se alegrarán; el desierto se regocijará y florecerá como la rosa. Isaías 35: 1

Hay momentos en que los recuerdos llegan a nuestras vidas. Recuerdos del olor del aroma de las flores incluido el peculiar olor de una rosa. Ese olor que despierta nuestros sentidos y nos recuerda tantas cosas …

Las flores nos recuerdan que ha llegado la primavera. Las flores nos recuerdan detalles como el día de la madre, cumpleaños, enamorados e incluso la muerte de un ser querido. Las flores nos despiertan ese olor que nunca queremos olvidar. Las flores con sus colores expresan esa ternura de lo que puede representar ese sentimiento o ese momento especial que llega a nuestras vidas.

Pero … llega un momento en que las flores pierden sus hojas, pierden su color y pierden su aroma. Y, si lo dejamos en esa jarra de agua por mucho tiempo, se marchitará, y si no lo cultivamos morirá y con el tiempo esos majestuosos colores se oscurecerán. Por eso, hay momentos en nuestra vida en los que se pierde la magia, se pierde la esencia de lo que fue esa relación un día. Las flores pueden representar tanto el amor por algo que comenzó como el amor que se fue a la tumba de ese ser querido. Ya no huele a rosas es el dicho que escuchamos y ese dicho realmente tiene sentido.

¿Es que con el detalle de una flor podemos revivir recuerdos? ¿O, es que las flores ya no tienen el mismo significado que tenían antes? Tiempos en los que pensamos que ya no huele a rosas …

 

Oración: abre tu corazón

Señor Jesús, estoy frente a tu presencia pidiéndote que seas el jardinero de mi corazón. Que seas tu amor sembrado en mi corazón. Te lo pido en tu nombre Jesús. Amén.

Consejo

Queridos amigos, quizás para muchos habéis perdido lo imprescindible que un día fue. Puede que se haya perdido la esperanza. Quizás ya no quede ese olor fragante que un día fue esa relación. ¿Pero sabes algo? Hay un jardinero que puede ayudarte a cultivar esa flor que alguna vez fue. Simplemente busca ayuda y recupera lo que alguna vez fue. Nunca es demasiado tarde para las oportunidades en tu corazón. Deje que el jardinero por excelencia, Jesús, trabaje en tu corazón.