Tú que me has hecho ver muchas angustias y aflicciones, me volverás a dar vida, y me levantarás de nuevo de las profundidades de la tierra. Salmos 71:20.
Hoy, mientras caminaba observe como cavaban un hoyo (concavidad, hueco o agujero) para plantar un árbol. Mientras observaba como hacían el hoyo, observe como el conductor de la máquina hacia el hoyo y la otra persona le indicaban la profundidad que requería el hoyo para poder sembrar el árbol. Al continuar observando el proceso, otro conductor traía el árbol protegiendo las raíces para que no se afectaran con el movimiento, aunque el árbol no tenía hojas, por el invierno, sabía que pronto sus hojas llegarían con la primavera. Al analizar este proceso, pensé que así es nuestra vida como un árbol el cual dependía de la profundidad del hoyo para sostenerse con los cambios climáticos. Y, me preguntaba, ¿cuán profundo estará nuestro hoyo? Continue reading “El hoyo”