Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal. Mateo 6:34.
Muchas veces nos hemos encontrado tan ocupados que nos olvidamos de respirar. Respirar… Hoy en día con todo lo que está sucediendo con el COVID-19 muchos hogares sufren de estrés, ya no son solo ama de casas, profesionales, sino hasta se han convertido en maestros, tienen más roles de los usuales. Todo se le ha combinado en un solo día.
Ya el día no es usual, ya no son 8 horas laborales, esas horas laborales se han triplicado y no hay un salario que pague todas esas labores que el día les trae. Nos hemos encontrado sin respirar, el oxigeno ya no es el mismo. Un poco de aire natural hace falta a nuestro organismo, respirar, respirar…Cuando nos encontremos en una situación que ya sientes que no puedes mas tomate un tiempo para ti. Tú eres importante. Tomate un tiempo de amarte a ti.
El respirar trae unos beneficios donde nuestros músculos se relajan. Por lo que, nos permite llenar nuestros pulmones provocando disminución de los latidos y con ello se relajan nuestros músculos. Al respirar tenemos control de las emociones por ende, al controlar el ritmo y la profundidad nos ayuda a tener un estado más claro de nuestros pensamientos. Al respirar nos sentimos más tranquilos y nos permite refrenar la ansiedad. Mis queridos amigos, no olvidemos que cada día trae su afán, no se preocupe por el futuro, respire y mire el presente con tranquilidad pues Dios le ayudara en el día a día.
Oración: Abre tu corazón
Señor Jesús, estoy delante de tu presencia pidiéndote perdón. Te pido que yo pueda respirar y confiar plenamente en ti. Así como las aves de los cielos y la hermosura de la naturaleza tu les cuida así mi vida está en tus manos. Te lo pido en tu nombre Jesús, Amen.
Consejo
Mis queridos amigos, se que vivimos tiempos difíciles. Vivimos mas estresados de lo normal peor hoy es tiempo que tu tomes un tiempo para ti. Respira, mira a tu alrededor, amate y disfruta de las cosas más sencillas de la vida como lo es el respirar. No te afanes pues cada día trae un nuevo propósito.