Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal. Mateo 6:34
Cuando todo parece que el camino no conduce a ningún lugar siempre hay un destino final. Estaba recientemente, leyendo un mensaje que decía “No te rindas nunca porque nunca sabes si el próximo intento será el que funcionara.” Hay momento que bajamos la guardia…¿le ha sucedido?
Hay momentos que nos montamos en el automóvil y comenzamos a manejar sin rumbo, sin un destino. Y así es muchas veces nuestras vidas. Situaciones que parecen interminables, que seguimos y seguimos sin llegar a encontrar la salida. Pero. Cuando miramos el horizonte hay un sol que aparece como también un hermoso atardecer que nos quedamos sin aliento. Y, nos recuerda que cada día trae su afán y que cada día termina para iniciar un nuevo día.
Un nuevo día, que nos hace ver la vida desde otra perspectiva y que al final el automóvil se detiene y llega a un lugar donde nos hace bajar y ver que si hay un lugar donde teníamos que llegar aunque no sea el esperado. Solo Dios tiene el cuidado de nuestro destino final. Lo importante es no rendirnos pues siempre habrá algo mejor si funcionara.
Oración: Abre tu corazón
Señor Jesús, estoy pidiéndote dirección para poder tomar el mejor camino que me lleve al lugar seguro donde se que será mucho mejor que el de ahora. Amén.
Consejos
Mis queridos amigos hay momentos que nos encontramos afanados y pensamos que nada de lo que hacemos funciona. Pero, sabes es como el alfarero que hace la vasija y le da la forma hasta obtener el resultado final, la vasija perfecta. Y, tu vida es una perfecta en las manos del alfarero,Jesus.