Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia. Jeremías 31:3.
Estaba revisando mi Facebook y me encontré con un mensaje que cautivo mi mirada, el cual procedí a leer. Y parte del mensaje decía:
“En el amor hay que ser honestos, amar a alguien sin excusas y sin pretextos. Es momento de dejar de andar amando un día sí, al otro no. Para amar se requiere de mucha honestidad, sinceridad, seguridad y valentía.”
Al leer y reflexionar este pasaje recordé la primavera que ya comenzó en el hemisferio norte, el cual se siente una atmosfera llena de color y aires frescos que nos cautivan a todos. Más aun en el mes de abril celebramos y recordamos el amor de Jesús en la cruz. Dos grandes eventos, donde yo siento que la combinación de ambos nos llevan a explorar nuevos bríos en nuestras vidas.
El carácter de Jesús está basado no solo en su amor sino en la justicia. Dios es amor, que a pesar de que esta consiente de nuestros pecados y de que muchas veces somos indignos, Jesús nos recuerda que con amor eterno nos ha amado y por lo tanto prolongue su misericordia. Y, también nos recuerda que es Dios de oportunidades. La demostración más grande fue su amor cuando dio su vida por todos nosotros. Por lo que, su amor fue dado sin excusas y sin pretextos, su amor no anda amando un día sí u otro no. Su amor es permanente, nunca cambia, es el mismo de ayer, hoy y para siempre. Su amor fue a tal grado o magnitud que requirió de honestidad, sinceridad, seguridad y sobre todo de valentía para morir por ti y por mí.
Es lamentable como personas mal interpretan el amor de Jesús. Hay personas que piensan que como es un Dios de amor, todo estará bien, y que nunca nos va a juzgar. El amor de Dios es también justo. Por lo que, nos recuerda que solo los justos verán su rostro (Salmos 11:7). De modo que, todos aquellos que han reconocido que Jesús es su Dios y Salvador han aceptado el regalo más hermoso de sus vidas, el perdón de sus pecados. Y, los que no han aceptado este hermoso regalo quedan bajo el juicio de Dios. Pero, qué bueno es saber que Jesús sigue siendo como la primavera, nos da cada día nuevas oportunidades para creer en Él. Lo cual refleja su inmenso amor que tiene por la creación y la humanidad. El sacrifico de la cruz nos dio entrada a acercarnos a Él.
Mis queridos amigos (as), el amor de Dios siempre estará presente, Él no te abandonará, no te causara dolor, y no te romperá el corazón. Cuando sientas que tu vida está a la derriba, sin rumbo y sin dirección recuerda el amor de Dios por ti. Mira a la cruz y recuerda que no fueron los clavos que sostuvieron a Jesús en esa cruz, ¡sino su amor por ti y por mí!
Oración: Abre tu corazón
Señor Jesús, hoy estoy ante tu presencia con el corazón en la mano y gimiendo de tanto dolor. He experimentado de todo, he dejado todo, y hoy estoy desnudo ante tu presencia. Quiero hoy acercarme a ti y pedirte perdón. Perdona todos mis pecados y haz hoy una persona nueva en ti. Que la sangre que derramaste en esa cruz del Calvario purifique mi alma y mi cuerpo, te lo pido en tu nombre Jesús, Amen.
Consejo
Mis queridos amigos (as), nunca es tarde para comenzar de nuevo. Siempre a oportunidades de enmendar nuestros errores y comenzar de nuevo. Y, si entiendes que tu error es difícil de enmendar para el hombre, no te preocupes porque Dios te dará la sabiduría para manejar cada asunto. Te recomiendo, este mes que estamos en cuaresma muchas de las iglesias están abiertas para recibirte. Visita una de tu preferencia y celebra la vida en Jesús. Jesús es un Dios de amor y de justicia, aprovecha esta nueva oportunidad en tu vida.
Excelente contenido,El Amor de Jesús va más allá de lo que no podemos imaginar. Sin su amor nada somos!!
Gracias Justy! Estoy muy de acuerdo con tus palbras. Dios te bendiga!