Todo tiene su momento oportuno; hay un tiempo para todo lo que se hace bajo el cielo. Eclesiastés 3:1
El tiempo…cuan rápido y lento a la misma vez. Al hacer una retrospección de lo vivido nos damos cuenta todo lo que hemos vividos. Algunos hemos llorado, hemos reído, hemos perdido a un ser amado, hemos tenido altas y bajas, pero a pesar de todas las experiencias vividas nos hemos mantenido pie.
Las fuerzas quizás se nos agotan; y pensamos que no podemos continuar, pero nuestro Dios nos recuerda que con El todo es posible. Comenzar es un proceso cuesta arriba, y aún más si hemos fracasado en el intento. Cuantas personas nos anima a continuar y otras quizás se burlan a tus espaldas, pero no importando lo que digan o hagan todo depende de uno mismo. Por ende, ¿nos dejamos vencer por las circunstancias o decidimos subir la montaña?
El tiempo es nuestro mejor amigo. Lo importante es que no nos demos por vencidos. Quizás hay momentos que no vemos los resultados y nos desesperamos, pero que bueno es saber que todavía el mundo gira y el tiempo es una herramienta para iniciar la marcha. Quizás no tenga lógica, quizás no tenga sentidos, pero de una cosa estoy segura de que el tiempo lo define uno mismo y no los demás.
Oración: Abre tu corazón
Señor Jesús, estoy delante de tu presencia pidiéndote sabiduría y nuevas fuerzas para continuar escalando la montaña. Se tú mi refugio en medio de cada circunstancia, te lo pido en tu nombre, Jesús. Amen.
Consejos
Mis queridos amigos, no permitas que la gente dirija tu presente y futuro. Solo pídele a Dios que te ilumine a continuar. Pide la sabiduría de lo alto para tomar la mejor decisión. No permitas que el momento dicte tu futuro. Tu tienes el poder de cambiar tu presente. El tiempo es tu mejor aliado. Cuando mires hacia atrás veras que valió la pena continuar. No te rindas, yo voy a ti.