El Surfista

¿Acaso has dejado de temerme?  —afirma el Señor—. ¿No debieras temblar ante mí? Yo puse la arena como límite del mar, como frontera perpetua e infranqueable. Aunque se agiten sus olas, no podrán prevalecer; aunque bramen, no franquearán esa frontera. Jeremías 5:22.

Es impresionante cuando vemos a un surfista en la alto de las olas del mar. Ver como el peso de su cuerpo esta sobre una tabla de surfista y puede mantener su cuerpo en equilibrio sobre la ola del mar. El surfista espera pacientemente el oleaje para iniciar su proceso para poder llegar a ella y subir a las alturas como señal de victoria. Y, me pregunto ¿acaso nuestra vida es comparada como el surfista?

Las olas del mar tienen una energía que transportan por la superficie de las aguas. Ese oleaje es el momento perfecto para que los surfistas puedan usar esa gravedad en la superficie del agua para alcanzar sus objetivos. Pero, el surfear para llegar al tope no es fácil, hay batallas, hay caídas y hay muchos intentos en el cual el surfista no se da por vencido hasta lograr llegar al tope de la ola.

Hay circunstancias en la vida que son como el oleaje que llega con esa energía que nos derrumba. Posiblemente se cansan nuestros brazos de tanto nadar. Pero, que enorme satisfacción cuando podemos usar esa enorme ola a nuestro favor. Poder ser como el surfista y elevarnos a las alturas en señal de victoria y que esa situación por más difícil que sea la podemos usar como un canal para llevarnos a la orilla del mar. Esa orilla donde existe un límite donde aún esa ola por más energía que tengan no puede traspasar esa frontera en la tierra. Por lo que, tu situación por más difícil que parezca no podrá prevalecer para siempre.

Oración: Abre tu corazón

Señor Jesús, estoy delante de tu presencia pidiéndote sabiduría para poder llegar al lugar seguro que tu deseas para mí. Amen.

Consejos

Mos queridos amigos, se que no es fácil cuando estamos en la batalla continua y que parece que nunca alcanzaremos la meta deseada. Pero, sabes algo…no hay nada imposible para mi Dios. Usa cada situación a tu favor. Toma un tiempo a solas, medita y habla con Dios. Y, luego impúlsate como el surfista y usa esa situación a tu favor.

Mira desde otra perspectiva como esta situación X la puedes usar para elevarte a otro nivel. No le tengas miedo a esa ola pues, no podrá pasar los limites establecidos por ley sobrenatural. Recuerda siempre que todo esta dentro del control de Dios que creo el cielo, la tierra y la mar por lo que existe un orden que tienen propósitos en este mundo. Recuerda, “Aunque se agiten sus olas, no podrán prevalecer; aunque bramen, no franquearán esa frontera.”