El malo está atento al labio inicuo; Y el mentiroso escucha la lengua detractora. Proverbios 17:4.
“¿Se enteró de un chisme muy interesante? ¡No! Dime…” Le suena ¿esto?
¿Qué es chisme? Un chisme es un rumor o una habladuría que suele difundirse de boca a boca, muchas veces con la intención de criticar a una persona. Al escucharlo, el alma es contaminada ya que le ha permitido escuchar lo que están diciendo. Al escuchar comenzara usted comienza a creer que posee mayor acierto de lo que se les está hablando, pero la realidad es que ahora usted comienza a desconfiar de esa persona o cosa.
Por lo que, al escuchar el nombre de esa persona o producto su mente comienza a crear acusaciones y quejas basado en lo que escucho impactando así su objetividad. El chisme comienza a crear en usted incredulidad y temor. Entonces, nos convertimos en victimas del miedo y de no en confiar en lo que hay de tras de una verdad. Así que dudamos de la capacidad de las otras personas impactando la oportunidad de conocer quiénes son. Y, si es un producto no nos permitimos la oportunidad de probar si en verdad funciona. Por ende, permitimos que el chisme invada nuetra mente y corazón dando lugar al miedo, inseguridad y desconfianza. ¿Qué debemos hacer cuando el chisme este alrededor tuyo?
Primeramente, no debemos responder de la misma manera en que nos llega la información. Por ejemplo, nunca agregar más información con el que trae el chisme o esté de acuerdo. En Proverbios 26:4 dice “Nunca respondas al necio de acuerdo con su necedad, Para que no seas tú también como él.” Segundo, debemos desarrollar sabiduría y discernimiento, Tercero, debemos responder con palabras de vida; por ejemplo: ¿Por qué me estás diciendo esto? ¿Me están pidiendo que vaya con ellos para restaurar sus vidas? ¿Me encuentro en posición de ayudar esta persona? Si la contestación es no, entonces retírese cortésmente de la conversación o cambie el tema de la conversación. Recuerde, que un hijo de Dios ama a todos por igual con sus virtudes y defectos.
Oración: Abre tu corazón
Señor Jesús, me arrepiento si en algún momento he usado una conversación para criticar o hablar mal de mis semejantes o he puesto mi atención a escuchar algún chisme, perdóname. Admito que con mis propias fuerzas no puedo, quita de mi toda raíz de amargura y todo pensamiento negativo de mi mente. Te lo pido en tu nombre, Jesús, Amen,
Consejo
Mis queridos amigos, es muy difícil resguardarse uno mismo del chisme, pero cuando esteos en una conversación y fluye el nombre de X o Y persona pregúntese lo siguiente:
- ¿Por qué me cuenta esto?
- ¿Están diciendo sus reacciones ante una ofensa o lo dicen solo para influenciarme?
- ¿Es algo bueno lo que van a decir?
- ¿Puedo ayudar a esa persona?
Aléjese de las personas chismosas y que cuentan cosas desagradables. A la larga ellos pueden también crear chisme sobre ti.
Oremos por esas personas y que Dios trasforme sus vidas.