5 Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada. Santiago 1:5 (RVR1960).
La toma de decisiones no es fácil, muchas veces cargamos tanto dolor y 
desesperación que no vemos solución. En la biblia hay varias historias de toma de decisiones, pero hoy, les quiero hablar de la historia del Rey Salomón y las dos mujeres con sus respectivos niños (1 Reyes 3:16-28). La biblia nos habla sobre dos mujeres que vivían bajo el mismo techo y ambas dieron a luz (parir). Una noche, una de las mujeres se le acostó encima de su niño y éste murió. Ella remueve el niño vivo de la otra mujer que estaba durmiendo y le coloca el niño muerto. La segunda mujer al despertar reconoce que el niño muerto no es su hijo. Y, es entonces que comienza entre ambas una fuerte discusión las cuales llevan el caso ante el Rey Salomón para que él tomara una decisión. En este caso no había testigos que presenciaran cuál de ellas estaba diciendo verdad. Para ese tiempo no existía los polígrafos ni otra tecnología como lo es la muestra de sangre, por lo que el Rey Salomón dependía totalmente de la sabiduría de Dios para tomar la decisión más correcta.
Cuando ambas mujeres expusieron su caso, el Rey Salomón pide una espada para cortar al niño vivo por la mitad. Al ver la verdadera madre que esto iba a ocurrir le pide al Rey Salomón que le diera el niño a la otra mujer. Mientras la otra mujer solicitaba que dividiera el niño por la mitad. Es de esta manera que Salomón descubre quien es la madre del niño vivo, la que pide entregar su hijo a la otra mujer. Y todo el pueblo de Israel que oyó aquel juicio reconoció que Dios le había dado la sabiduría a Salomón para juzgar y tomar decisiones.
Muchas veces nosotros llevamos un dolor profundo y no queremos reconocer que en Jesús hay solución. Le echamos la culpa a la otra persona y hasta de todo lo ocurrido a Jesús. Pero, la realidad es que Jesús nos da el libre albedrio de escoger el camino. Antes que tú continúes con esa decisión o rumbo de tu vida, Dios envía a personas que nos den consejos u advertencias, pero aun así continuamos con nuestro caminar. Hasta que llega un día que nos topamos con una desgracia y le echamos la culpa a Dios y hasta hay personas que le maldice. Pero, la verdad es que Dios todo lo ve y antes que tú nacieras ya que te conocía desde el vientre de tu madre (Salmos 22:10). En su amor, perdón y misericordia, Jesús siempre ha tenido cuidado de ti. Solo depende de ti que pidas sabiduría de lo alto antes de tomar una decisión. La sabiduría solo viene de Dios, él te dará las herramientas y las personas que te ayudaran a tomar las decisiones que te llevaran al éxito y al bienestar de tu vida. Solo pide sabiduría como lo hizo el Rey Salomón. ¿Qué esperas hoy? Solicitar sabiduría a Dios no cuesta nada.
Oración: Abre tu corazón
Señor Jesús, estoy delante de tu presencia si te he fallado. Perdonadme, si en mi desesperación he tomado la decisión más rápida y fácil, pero me he dado cuenta que no ha sido la más correcta. Sé que hoy, enfrento las consecuencias de esas decisiones. Me encuentro en un estado de desesperación y no encuentro que hacer. Pero, hoy, reconozco que no he escuchado tu voz, que me haz enviado personas a mi vida y no les he prestado la atención a sus palabras. Perdóname. Señor Jesús, hoy reconozco que solo en ti puedo hallar la confianza y tener la sabiduría de lo alto cuando vengo ante tu presencia. Perdóname y ayúdame a enfrentar mis circunstancias y a tomar de hoy adelante decisiones sabias en ti, Jesús. Amén.
Consejo
En nuestras vidas llegarán momentos difíciles y hay que tomar decisiones. Muchas veces no sabemos cuál es la mejor decisión, pero hoy te digo:
- La biblia dice que si te falta sabiduría pídele a Dios y él te dará respuestas.
- Orar, hablar con Dios. Siempre pídele dirección.
- Ayuna, te apartas a sola con Dios.
- Leer la Biblia, en ella encontraras respuestas.
- Evaluar y analizar todas las alternativas.
- Consultar o hablar con personas que te puedan ayudar: pastor, psicólogos, amigos, familia, y otros.
- No tomes decisiones a la ligera o rápido. Como dicen por ahí, duerme sobre tu almohada o sea mediata y piensa. Si requieres más tiempo, solo dilo.
- No te dejes influenciar por la prisa o el tiempo.
- Cuanto más tiempo, mejor es, ya que te da tiempo a reflexionar sobre el evento y la mejor decision.
- Si tienes familia (esposa e hijos), consulta con ellos. Ellos deben estar de acuerdo con la toma de decisiones ya que impactara a toda la familia.
- Sé paciente, es fundamental en la toma de decisiones.
- Tener confianza, en Jesús porque es manantial de vida y te aparta de los lazos de la muerte (Prov. 14:26-27). Solo confía.