Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente. 1 Corintios 2:14.
La duda y la confusión nos han llegado a todos. Preguntamos, dudamos y los pensamientos que tenemos nos llevan a la confusión. Una confusión que nos lleva atrás, adelante, y pasos atrás, pensamientos que nos lleva a no tomar decisión. Nos invade el miedo, nos invade las incertidumbres. La mente del que duda es como el hombre de doble animo. Con frecuencia la confusión y las dudas nos lleva a sentirnos sin sentido y nuestra mente vaga a la derriba. ¿Cuáles son las consecuencias de nuestra confusión y duda?
Muchas veces nos ponemos a razonar y pensamos tanto que la mente da vueltas la cual nos lleva a no hacer nada ya que creamos confusión. A veces la lógica humana no es la lógica de Dios. Todos en algún momento tenemos un pensamiento que nos guía hacer cosas, y pensamos que no tiene sentido. Decimos que no tiene sentido comienza la lógica humana, pero no nos hemos detenido a pensar que nuestro Dios desea hacer o guiarnos en su propósito. Si nos diéramos la oportunidad de escuchar la voz que llega a nuestros pensamientos y afirmarlo nos ayudara a entender que el espíritu de Dios predominara sobre la mente.
Cuando abrimos el corazón y la mente a Dios podemos entender mas allá de la lógica y razonamiento humano. Dios nos muestra lo que realmente debemos hacer aunque no nos guste la idea. Es tiempo de entender al espíritu aunque el hombre natural no entienda al hombre espiritual. En Proverbios 3:5 dice “Confía en el Señor con todo tu corazón y no te apoyes en tu propio entendimiento.” Por lo tanto, evita cuestionar y permítete escuchar la voz de Dios.
Oración: Abre tu corazón
Señor Jesús, perdóname si alguna vez he razonado tanto que he olvidado que tú me hablas a mi espíritu. Ayúdame a escuchar tu voz y hacer tu voluntad y no la mía. Te lo pido en tu nombre Jesús, Amen.
Consejos
Mis queridos amigos, vivimos en tiempos donde la informática esta tan acelerada que cuando llega una idea a nuestra mente comenzamos a razonar y a cuestionar. No estoy diciendo que esto está mal sino que sepamos controlar los pensamientos negativos que lleguen a nuestra mente. ¿Cómo puedo hacer esto? Busca ayuda, lee la biblia, ora y habla con Dios. Escucha tu corazón, a veces hay cosas que soltar para ganar otras.