Cara o Cruz

La bendición del Señor trae riquezas, y nada se gana con preocuparse. Proverbios 10:22.

Existe la idea de que muchas decisiones se toman tirando una moneda al aire, cara o cruz, como muchos conocemos. Pensamos que la vida es como un juego de azar y dependemos de una decisión que se tira al aire para ver cuál será la última decisión. Sin embargo, mucha gente no entiende es el resultado no depende de esto, sino que depende de uno mismo. Es como reflejarse en el espejo. Al mirarse al espejo, vemos el reflejo de lo que realmente somos. Si eres una persona fuerte, de alta autoestima, de valores, y confianza en ti mismo veras todo el esfuerzo que has puesto en ti para llegar donde estas. Por otro lado, si te sientes débil, de baja autoestima, de poco valores y poca confianza en ti mismo, veras reflejada a una persona fracasada y de pocos logros en la vida.

Pero, sabe algo Dios no creo a una persona débil ni fuerte, Dios creo a una persona a su imagen y semejanza, o sea, una persona perfecta. A una persona con muchas cualidades, virtudes, talentos, y un ente pensante para tomar decisiones que los lleve al éxito en toda su vida. Por lo que, todo depende de uno mismo para triunfar. Dependemos de controlar los pensamientos negativos y llevarlos a pensamientos de persona exitosa. Dios creo a la persona para que prospere dentro de este universo que vivimos. Lo que debemos hacer es obedecer a Dios, a su palabra y hacer de un lado ese distorsionado y perverso concepto de fracaso y de inferioridad de nuestra mente. Es tiempo de crear un fundamento sólido, ¿sabes cuál?, que eres una persona perfecta, con propósitos y no depende de casualidades.

Oración: Abre tu corazón

Señor Jesús, estoy delante de tu presencia pidiéndote perdón. Reconozco que mi vida depende de ti. Reconozco que soy tu hijo(a) y que soy parte de una creación perfecta. Ayúdame a tomar sabias decisiones para mi bienestar y la de mi familia. Amen.

Consejo

Mis queridos amigos, sé que muchas veces nos invade los temores y la incertidumbre de nuestro presente y futuro. También, quiero recordarte que tu vida no depende de tu pasado sino con lo que tú deseas hacer de hoy en adelante. La vida no es un juego al azar. La vida te la ha dado Dios con propósitos. Solo depende de ti para tomar decisiones y buscar ayudas que te ayudaran a triunfar y a continuar tu camino. Busca ayuda, ora y lee la biblia pues en ella encontraras respuestas.

Respétate, amátate a ti mismo, porque si tú no te valora nadie lo hará por ti. Escoge decisiones sabias y no por emociones. ¡Cree en ti! La próxima vez que te veas al espejo, reflejaras a una persona de luz. ¡Brilla donde este!