Bendiciones

Jehová te enviará su bendición sobre tus graneros, y sobre todo aquello en que pusieres tu mano; y te bendecirá en la tierra que Jehová tu Dios te da. Deuteronomio 28:8.

Comienza un año lleno de bendiciones y sobre todo de decisiones. Un nuevo año donde muchos de nosotros comenzamos con nuevas metas y nuevos proyectos. Muchas personas hablan o predicen que ira a pasar este nuevo año. Algunas de ellos predicen cosas buenas como otras malas. Es tiempo de políticas y cambios en nuestros países. Continúan  los rumores de guerra, de hambre y tantas cosas que el hombre mismo ha provocado en nuestro planeta. Hay muchas personas que piden por la paz, por la armonía, por la unión familiar, salud, estabilidad financiera, y tantas peticiones que cada uno lleva en su mente y corazón. Pero, hay algo importante para este nuevo año que inicia y es que hay bendiciones que olvidamos reclamar y que viene del cielo, de nuestro Padre Celestial. ¿Cuáles son esas bendiciones?

Sí, hay que estar preparados en todo tiempo, pues no sabemos cuándo llega el ladrón, no sabemos cómo se comportara el planeta tierra o como se compartan los líderes de nuestros países. Pero, de una cosa estoy segura para este año que inicia y es que está lleno de bendiciones, y una de ellas es que Dios nos recuerda no somos cola sino cabeza. Que Dios nos recuerda en Deuteronomio 28:1-14 lo siguiente:

Acontecerá que si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la tierra.

Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios.

Bendito serás tú en la ciudad, y bendito tú en el campo.

Bendito el fruto de tu vientre, el fruto de tu tierra, el fruto de tus bestias, la cría de tus vacas y los rebaños de tus ovejas.

Benditas serán tu canasta y tu artesa de amasar.

Bendito serás en tu entrar, y bendito en tu salir.

Jehová derrotará a tus enemigos que se levantaren contra ti; por un camino saldrán contra ti, y por siete caminos huirán de delante de ti.

Jehová te enviará su bendición sobre tus graneros, y sobre todo aquello en que pusieres tu mano; y te bendecirá en la tierra que Jehová tu Dios te da.

Te confirmará Jehová por pueblo santo suyo, como te lo ha jurado, cuando guardares los mandamientos de Jehová tú Dios, y anduvieres en sus caminos.

Y verán todos los pueblos de la tierra que el nombre de Jehová es invocado sobre ti, y te temerán.

Y te hará Jehová sobreabundar en bienes, en el fruto de tu vientre, en el fruto de tu bestia, y en el fruto de tu tierra, en el país que Jehová juró a tus padres que te había de dar.

 Te abrirá Jehová su buen tesoro, el cielo, para enviar la lluvia a tu tierra en su tiempo, y para bendecir toda obra de tus manos. Y prestarás a muchas naciones, y tú no pedirás prestado.

Te pondrá Jehová por cabeza, y no por cola; y estarás encima solamente, y no estarás debajo, si obedecieres los mandamientos de Jehová tu Dios, que yo te ordeno hoy, para que los guardes y cumplas, y si no te apartares de todas las palabras que yo te mando hoy, ni a diestra ni a siniestra, para ir tras dioses ajenos y servirles.

¿Qué tenemos que hacer para recibir esta bendición? Solo poner a Dios primero en todo y lo demás será añadido. Deposita todo en los hombros de nuestro Dios, obedece al llamado que hay tu corazón y veras como las puertas de los cielos llenaran tu casa. Bendiciones de parte de nuestro Dios.

Oración: Abre tu corazón

Señor Jesús, estoy delante de tu presencia pidiéndote perdón si he comenzado este año con metas sin contar contigo como el primero en todo. Hoy, deseo pedirte que tomes posición de mi vida y de todo lo que tú tengas para mí en este nuevo año que inicia. Te lo pido en tu nombre Jesús, Amen.

Consejo

Mis queridos amigos, les deseo un nuevo año lleno de abundancia y bendición en cada vida. Que los deseos de su corazón y metas sean cumplidas. Les invito que antes evalúen cada meta establecida con su familia, sean realistas en todo lo que se propongas. Evalúen con que presupuesto cuenta para cada meta. Establezcan prioridades, pero sobre todo que Dios sea el principio de todo. Pues, ¡Dios tiene siempre algo especial para ti!