¿No me teméis?” –declara el SEÑOR. “ ¿No tembláis delante de mí, que puse la arena como frontera del mar, límite perpetuo que no traspasará? Aunque se agiten las olas, no prevalecerán; aunque rujan, no pasarán sobre ella. Jeremías 5:22
Muchas veces nos hemos encontrado frente al mar, tan inmenso, con un horizonte sin limites y a la misma vez tan pequeño nos vemos cuando estamos sumergidos en el. Pero sabemos que al tocar el mar cuando sumergimos nuestros pies, sentimos calma, sentimos que nos hace una invitación a sumergir nuestro cuerpo en el.
Vemos el color azul, vemos el color verde o la transparencia en el que nos hace sentir estar en paz y que dentro del mar hay un suelo que pisamos brindándonos la confianza que hay algo que nos sostiene bajo nuestros pies.
El aire sopla, acaricia nuestros cabellos, acaricia nuestros cuerpos. El aire nos susurra todo esta bien. Solo respira, exhala, y llena tus pulmones de la sabiduría que nos brinda la naturaleza. Que hermoso es saber que estamos rodeados de árboles que nos acobija con sus sombras, un mar que nos dice descansa y un suelo que nos sostienes, pero sobre todo un aire que sopla a plenitud sin decir nada.
Miedo a lo desconocido, pero con la confianza que estoy rodeada de una energía maravillosa, de una energía que le brinda a mi espíritu que hay algo más allá de lo usual, que me invita a estar en paz y a sumergirme con la paz que Dios me da a través de la majestuosidad de la naturaleza.
Oración: Abre tu corazón
Señor Jesús, estoy delante de tu presencia pidiéndote perdón. Hoy, quiero que tu me ayudes a dar confianza y que me des la sabiduría para tomar decisiones. Te lo pido en tu nombre Jesús, Amen.
Consejos
Mis queridos amigos es tiempo que nos demos la oportunidad de explorar nuevas experiencias y vencer tus miedos. Date la oportunidad de participar en cosas nuevas. Sal de tu zona confort, sal de tu rutina. Mis queridos amigos es tiempo de explorar nuevos horizontes. Confía en Dios.